JAVIER QUINTELA · ATELIER

 

Javier Quintela

Javier Quintela

“Alma y cariño”. Es lo que desprende la primera colección de Javier Quintela. Desde su atelier, en el casco antiguo de A Coruña, el diseñador crea prendas únicas y artesanales. Cada una de ellas “es parte de mi personalidad adaptada a las necesidades, a los gustos y a la fisionomía de cada mujer”, explica Javier.

Siempre tuvo claro que quería diseñar una colección propia. Después de formarse en A Coruña se marchó a Barcelona y pasó allí un año. Ha trabajado durante más de 14 años en el mundo de la moda. “Probé varios tamaños diferentes de empresa, pero siempre tuve claro que me gustaría trabajar por mi cuenta”, relata el diseñador. Trabajó para Inditex, Blanco, Caramelo o Carolina Herrera, pero necesitaba la libertad para abarcar todo el proceso creativo: “mi experiencia es que en las empresas eres como un número y pasas casi más tiempo justificando en qué inviertes el tiempo, que trabajando y diseñando. Siempre me gustó todo el proceso desde el diseño, la búsqueda de información, los tejidos, el patronaje… En una empresa estás más centrado en un trabajo concreto que en todo el proceso”, cuenta el diseñador.

Hace cinco años decidió dar el salto y abrir su propio taller. Comenzó diseñando vestidos de novia y fiesta a medida. “Se casaba una amiga y después de ir con ella por varias tiendas y probarse cosas, nada le convencía. Le diseñé su vestido y me animó a tomar la decisión”, recuerda. “Después de cinco años haciendo vestidos de novia y madrina, me he dado cuenta que la mayor parte de la gente que venía y rechazaba el presupuesto era precisamente por eso, por el presupuesto, no por el diseño, que les encantaba”, explica. Por ello Javier decidió presentar su primera colección a finales de 2015. Se trata de una selección de 19 piezas a medio camino entre la alta costura y el prêt-à-porter. “Hice la colección para que cualquier persona que quiera llevar un vestido hecho por mi pueda pagarlo porque son precios de mercado”, añade.

Su día a día, la personalidad y el cuerpo de las mujeres son su principal inspiración para crear. Los vestidos y prendas que diseña Javier Quintela son atemporales: “vestidos elegantes, y también sencillos, pero que tengan un toque. Que tú lo veas en el armario dentro de cinco años y te lo puedas poner. No sigo las tendencias, y creo que en vestido de fiesta tampoco tiene mucho sentido”, explica.

Cada una de las 19 piezas se elabora bajo pedido en la talla y el color que elija cada clienta, siempre respetando los procesos de fabricación artesanales, tanto en el corte y en la confección como en los acabados de las prendas. La colección la componen vestidos y faldas ajustados al cuerpo; vestidos ablusados; faldas tulipán y campana o líneas trapecio y rectas. Siluetas diferentes para mujeres, estilos y momentos diferentes. Javier recibe a las clientas en su atelier, ajusta el patrón a las medidas de cada mujer, y tras elegir el color, se corta y se confecciona manualmente. Aunque reconoce que en el sector es “difícil llegar al público”, sus clientas normalmente le conocen por “el boca a boca”. Asegura que cuando entran por la puerta “lo ves en su cara, les gusta el atelier y valoran mucho el trabajo artesanal”.

Artesanía, diseño y esfuerzo han sido la base para que Javier Quintela consiguiese hacerse un hueco en el mundo de la moda: “no es fácil cumplir tu sueño, pero es precioso y maravilloso levantarte cada mañana y hacer lo que gusta”.

Javier Quintela